¿Cuántas veces has escuchado aquello de «las redes sociales me las lleva mi sobrino»? Y no, no me refiero a esos sobrinos con la formación y experiencia adecuada para ser community managers. Sino a esos «espabilaos» que han descubierto que «eso de subir fotos a Facebook» es una forma facilona de sacar unas «perrillas» extra… Quiero explicarte por qué tu community manager no puede ser tu sobrino (ese al que le gusta subir fotos a Facebook).
Seamos claros: el que algo quiere, algo le cuesta. Si pretendes conseguir más clientes, aumentar el reconocimiento de tu marca y mejorar tu reputación online, deberás invertir en marketing y en redes sociales. Cuéntame, alma de cántaro: ¿qué es lo que pretendes exactamente dejando a cargo de tu sobrino / primo / amigo o vecino que no tiene ni idea de marketing ni de comunicación las redes sociales de tu empresa? Luego vendrán los «madremías». No digas que no te avisé.
Quizás aprecies desde el otro lado de la pantalla cierta crispación en el ambiente. Lo siento, soy 100% transparente hasta cuando tecleo. Ya sé que no es ninguna novedad, que en el sector de la comunicación siempre ha habido intrusismo. Pero estamos llegando a un extremo en el que parece que cualquier chaval de instituto puede «llevar las redes sociales de tu empresa». Y creo que quienes de verdad hemos invertido nuestro tiempo y dinero en formarnos y en acumular años de experiencia para ser competentes en este trabajo, debemos explicarte «de tú a tú» por qué tu community manager no puede ser cualquiera.
Déjame ponerte en contexto. Te contaré cuál ha sido el detonante de esta explosión con forma de post. Últimamente mucha gente me escribe pidiéndome «precio para redes sociales». Yo siempre me pregunto: para redes sociales… ¿qué? Hace ya tiempo que dejé de enviar presupuestos genéricos. Cada empresa tiene unas necesidades y me esfuerzo en hacer propuestas específicas para cada solicitud. Así que lo siento si no te puedo decir aproximadamente a cuánto está «el kilo de redes sociales» porque, qué quieres que te diga, esto no es una frutería. ¿Qué resultado esperas conseguir? ¿De qué recursos dispones para ello? Sabiendo esto y algunas cuestiones más, elaboraré una propuesta definida para tu empresa. Y habiendo aclarado este punto, te explicaré por qué es mejor no tener community manager que dejar las redes sociales de tu empresa en manos de cualquiera.
No te puedo decir a cuánto está «el kilo de redes sociales» porque, qué quieres que te diga, esto no es una frutería.
El community manager ideal
Vale, estamos de acuerdo en que el príncipe azul no existe, y quizás el community manager ideal tampoco. Pero una cosa puedo asegurarte: las redes sociales pueden ser muy beneficiosas para tu empresa, pero con una gestión poco profesional, serán realmente perjudiciales. Toma nota, estos son los requisitos fundamentales que un buen community manager debe reunir:
Formación: en la teoría parece algo básico y de sentido común, pero en la práctica no parece serlo tanto. Que la persona a la que vas a confiar la imagen y reputación de tu empresa tenga la formación adecuada es fundamental. Y te estarás preguntando: ¿de qué formación en concreto estamos hablando? Principalmente me refiero a formación superior en comunicación. La mayoría de los community managers profesionales han estudiado carreras como Periodismo, Publicidad y Relaciones Públicas o Comunicación Audiovisual. Lo ideal -si no es mucho pedir- es que la persona que quiere ejercer como community manager complete su formación con un curso o máster en marketing online o community management.
Experiencia: ¿te gustaría que tu empresa sirviese de experimento a tu nuevo community manager? Seguro que no. Por eso, otro requisito fundamental que debe cumplir tu community manager es el de reunir cierta experiencia en el ámbito de la comunicación: en medios o agencias de comunicación, en departamentos de marketing… ¡Cuanta más, mejor! Y si además, tu candidat@ tiene experiencia concreta en el sector de tu empresa, ¡chapó!
Habilidades: llegamos a la que (en mi opinión) es la parte más importante. Porque de poco sirve tener un gran currículum si, a la hora de la verdad, no disponemos de las habilidades fundamentales para desarrollar un determinado trabajo. Además de escribir bien, un community manager debe ser un comunicador nato: alguien a quien se le dé igual de bien escuchar y hablar. Además, el community manager debe ser una persona muy creativa, con visión marketera y estratégica, a la que le guste la actualidad y la tecnología y, por supuesto, la analítica. A esto añadimos cualidades personales como la empatía, la personalidad, la originalidad o la iniciativa y… si mezclamos correctamente todos los ingredientes, es muy probable que estés lo más cerca posible del community manager ideal.
¿Cumple tu sobrino / amigo / vecino – que «te lleva las redes sociales» alguno de estos requisitos? Qué otras cualidades crees que debe tener un buen community manager? Deja tu comentario. 😉
1 comentario en “Por qué tu community manager no puede ser tu sobrino”
El sobrinity manager cada vez está más a la orden del día. Alguna vez esto cambiará, sobretodo cuando las empresas que apuesten por un CM de calidad despunten sobre las que no.
Muy buen post como siempre!